Si se me presenta una oportunidad para preparar un postre, para compartir en casa, me gusta optar por una mousse que, si es de maracuyá, mejor todavía. En varias oportunidades he comentado que me encanta el sabor del maracuyá, el aroma y el sabor de esta fruta hace que este en mi top 10 de mejores frutas para utilizar en postres. Como había que preparar un postre para celebrar la navidad, aunque ya había torta negra, decidí preparar una mousse de maracuyá, aprovechando la excusa jaja.

Desde que comencé a estudiar pastelería de manera profesional, cada vez que tengo oportunidad de practicar, lo hago. Aunque todavía me falta camino por recorrer, he notado como mis recetas han mejorado bastante, como todo ha pasado de repostería a pastelería, es decir, de cosas caceras a niveles más profesionales. Cuando veo mis fotos de postres que prepare hace años o incluso meses, suelo reírme de como quedaban y aun así a las personas les gustaban, quizás alguna haga un post del antes y después. Por eso cada vez que se me presenta una oportunidad de practicar, la aprovecho, porque de eso se trata la pastelería: practica, practica y más práctica, con mucha paciencia.

Para esta mousse de maracuyá, la hice por capas, por así decirlo, ya que realmente incorpore 2 discos de bizcocho embebidos en el centro, para que el mousse tenga textura, esto porque sabía que había personas que no suelen comer mousse solas y al tener bizcocho, se transforma en una preparación con una consistencia ideal. Adicional coloque gotitas de chocolate amargo, para simular las semillas del maracuyá, pero principalmente para que hicieran un contraste con los sabores dulces y ácidos de todo el postre.

Esta mousse no es perfecta visualmente, aunque de textura me encantó. Seguiré practicando hasta lograr el balance perfecto de temperaturas y así poder una mousse prolija, pero fuera de eso, la combinación de los ingredientes fue perfectos y por eso te comparto esta versión.

Ingredientes y materiales

• 750ml de nata para montar (chantilly)
• 400ml de concentrado de maracuyá
• 150gr de azúcar glass o en polvo
• 40gr de gelatina sin sabor
• 80gr de azúcar común
• Gotas de chocolate
• un bizcocho de 22cm
• un molde de 24cm
• Lamina de acetato del tamaño de la circunferencia del molde

Preparación

• Si no consigues el concentrado de Maracuyá, puedes extraerlo de la fruta haciendo un jugo muy concentrado. En un bol agregar 250ml de concentrado y agregar 30gramos de gelatina sin sabor. Dejar hidratar la gelatina por el espacio de 5min y luego calentar para disolver la gelatina. No se debe calentar a más de 60grados para evitar que se pierda el efecto gelificarte de la gelatina. Dejar reposar hasta que esté a temperatura ambiente.

• Montar la crema de leche bien fría, junto con la azúcar glass. Cuando la crema este a medio montar, apagar la batidora o dejar de batir.

• Agregar el concentrado de maracuyá con gelatina y mezclar nos 20 segundos con la batidora y luego seguir con una espátula, esto para evitar que se sobre batir la crema.

• Colocar el acetato alrededor del molde, colocar el molde donde ira el postre y agregar un disco de bizcocho en la base, embebido con almíbar de ron o maracuyá. Colocar a gusto una buena cantidad de crema, comenzando desde la base. Repetir el proceso con otro disco de bizcocho y terminar cubriendo con la crema restante. Hay que asegurarse que la crema este bien en el borde, por lo que se hará en el siguiente paso. Llevar a enfriar por lo menos 1 hora dentro de la nevera o 30 minutos en el congelador.

• Con el sobrante de concentrado de maracuyá y gelatina, repetimos el primer paso. Hidratar la gelatina en el centrado, calentar y lo nuevo sería agregar la azúcar común. Esta mezcla debe estar a temperatura ambiente, ya que vamos a agregar esta mezcla encima de la mousse, para crear una capa de gelatina en la superficie.

• Dejar enfriar el tiempo suficiente, por lo menos unas 2 horas, para que la gelatina haga su efecto y todo el postre este frio. Entre más tiempo, mejor. Pasado el tiempo suficiente en la nevera, desmoldar, quitar el acetato y decorar con las gotas de chocolate.

Ya el mousse de maracuyá está listo, parece una receta compleja, pero realmente con la paciencia suficiente, se puede lograr un buen postre que es perfecto para cualquier celebración. Yo soy fan del mousse de maracuyá y me pareció perfecto para contrarrestar todos los sabores que están presentes en las comidas de navidad. De esa forma y como siempre debe ser, el postre es el broche de oro, lo que todos esperan al final de cada comida y lo que no deben olvidar.

Si eres fan del mousse de maracuyá, déjamelo saber en los comentarios, también déjame saber de qué sabores te gustan los mousses.

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_{Todas las fotografías fueron tomadas por mí con un Realme 7 pro. No autorizo a nadie reutilizarlas.}