Traumas de Infancia

Cuando encuentras una nueva pareja, se despiertan ciertas heridas emocionales de infancia que si no las observas y te haces cargo de ellas probablemente arruinen una relación que está comenzando, de este modo, si viviste una relación de abandono, en la infancia, la soledad, es tu miedo más profundo cuando comienzas una nueva relación, y observas también, cuando tu herida, te va a reflejar aquello que ocultas. Por qué te digo esto, porque si viviste el abandono, vas a tender a abandonar a tus parejas hasta que te hagas consciente de tu carencia y te hagas responsable de tu vida, y de la soledad que conlleva dicha situación. La mayor dificultad de las personas que sufren heridas de abandono, es que sus fantasías, su mismo entorno y hasta a su ego, les hacen creer que nunca reciben suficiente afecto y atención. Esta sensación de carencia, les impide, crear relaciones profundas con las personas que inician o mantienen una relación de pareja. Esto ocurre, porque se aman tan poco así mismos, que constantemente buscan en sus nuevas relaciones manifestaciones de afecto, afecta desde el punto de vista psicológico, que sienten que si sus parejas las aman, ellas se sentirán dignas de ser amadas.

Por esta razón, si sufres de abandono, sientes que no te quieren lo suficiente o no recibes todo el amor que necesitas, es posible incluso, que hayas desarrollado una relación de dependencia, como tu mayor temor es la soledad, no soportas estar a solas contigo mismo, aunque al final, acabas estando solo, por el mismo temor, que hace que te aísles te aislas, evitas el contacto el con los demás por miedo a sentirte dependiente y puedes generar un drama real por una situación sin importancia, y por cualquier detalle que en otras ocasiones pasaría desapercibido.

Dentro de las características que se encuentran presentes en esta herida, se encuentran principalmente las siguientes:
Intentar manipular a las demás personas a tu alrededor, en especial a tu pareja por medio de actitudes negativas, incluso en ocasiones agresivas. Aislarse de las personas y expresar frases como: “si me abandonas, no vuelvas…” Sobre todo en la vida adulta, esta herida, se podría resumir, en algo así como: “ante los peligros que pueda considerar, la persona actúa en función de que su pareja le abandone o que le pida que se aleje antes que este se vaya…”
Buscar constantemente la atención de tu pareja, te asusta tu propia autonomía, porque sientes que si la consigues hacer las cosas sin ayuda de otros, nadie se ocupará de otro, nadie se ocupará de ti en el futuro. En realidad crees que nunca serás capaz de valerte por ti mismo, y crees que necesitas a alguien en quien apoyarte.

De este modo, cuando te vuelves dependiente, necesitas a alguien en quien apoyarte. Y te aseguras que alguien esté a tu lado ocupándose de ti. Por ello buscas una pareja que te sirva de bastón y apoyo. Por esta razón, tu estado emocional, en las relaciones, sufre muchos altibajos emocionales, ya que crees que tu bienestar no depende de ti. Como tienes miedo de estar en soledad, tu humor en unos días es muy bueno y en otros muy malo, esto se debe a que buscas constantemente la presencia de tu pareja y ser apoyado por ella. Cuando desarrollas la dependencia, puede también ocurrir, que sufras una tristeza profunda incluso cuando estas con una pareja, sin saber muy bien por qué. Incluso puedes aguantar lo inaguantable con tu relación o una nueva pareja con tal de no sentirte en soledad, y aguantas porque crees que las cosas pueden cambiar o mejorar en un futuro. De esta manera, proyectas el malestar en tu pareja, tu malestar y dejas de escuchar tus propias emociones.

Provocas dramas o enfermedades para llamar la atención o dar pena. Las personas que desarrollan la dependencia, tienden adoptar el papel de víctima de forma inconsciente, como te aterra la soledad, porque crees que no puedes soportarla, puedes llegar hacer cualquier cosa con tal de llamar la atención. Se tiende a culpar a las demás personas de los males o a creer que es destino o mala suerte. Mientras que cuando estás solo, puedes llorar durante mucho tiempo, sin darte cuenta de que estás compadeciéndote de tu propio destino. Cuando sufres una herida de abandono, te cuesta mucho tomar decisiones por ti mismo, por eso buscas el apoyo de tu pareja, antes de tomar una decisión por tu cuenta, de cualquier índole. La realidad, es que necesitas sentirte apoyado y respaldado, aún en decisiones que tienen que ver contigo mismo, todo esto sucede porque cuando esto ocurre, te sientes ayudado y amado por la pareja, después de esto es probable que incluso no sigas la recomendación que te dio, porque lo que necesitabas era sentirte apoyado. En caso tal de que exista un desacuerdo y la pareja grita o se muestra enfadado, entonces te bloqueas, y te comportas como un niño que tiene mucho miedo…