One of the things that I reproached myself since I was a child, was not being able to share much time with my grandfather. And from those distant memories in my early years of life, I still have fresh in my mind the scene in which every afternoon my grandfather returned from work with a bag of bread and a liter of milk to share with all his grandchildren. An experience as beautiful as it was ephemeral that I still keep in my heart. From there, I have always been able to connect and get to know older people who have earned my affection and love, but if I have to talk about one in particular, it is my friend Rafael.
I met him some time ago thanks to the special affection of his wife, Olimpia, an exemplary lady who was outstanding in her love and attention. In fact, I was a son to her, and that feeling brought me close to them very quickly. In a very short time our friendship was established in a special way, a bond that would later suffer a hard blow with the death of Olimpia. That was a painful experience for Rafael, as he had been married for more than 50 years to the woman who had been his only partner in life. That tragic situation brought me much closer to Rafael.
One of the things that surprised me the most about Rafael was his way of assimilating something as difficult as the death of your spouse. Obviously at the beginning it was very hard, but little by little he knew how to hold on to the hope of someday seeing his beloved wife again. Just listen to him talk about her, he does it with a solid faith and a love that has not faded despite the storm. Even when we chat he says things like "Someday Olimpia and I will invite you to go fishing", and he does so with a conviction worthy of praise.
Rafael is already over 90 years old, but he has a spirit like 15. Every time we talk he tells me how much he wants to go camping in the mountains, go fishing or just buy a Jeep and go to a country area 😱🥰 As much as possible I try to share with him according to his possibilities, since right now he suffers from a pain in his right knee, so sometimes even his own daughters have to slow him down a bit so as not to expose himself to a fall or an effort that would harm him even more.
Talking to Rafael is like opening a complete encyclopedia full of history, anecdotes and many experiences. His ability to remember back to when he was 12 years old and lived with his parents in the countryside is impressive. He is fascinated by the life of a farmer, and for a while he had a plot of land where he could farm. After what happened with his wife and his leg ailment his daughters decided to sell the land to lighten his occupations a bit, but that was no impediment as he started to cultivate his own garden in the backyard of his house 🥰🤩.
If life gives me the opportunity to live for so long, Rafael for me is that figure in which I would like to reflect myself. A hardworking man, diligent to a fault and always willing to give you a hand, even if it means extra effort for him. I love his vision of life and how at his age he still has projects and dreams to fulfill. What I admire most about Rafael is the genuine love he has always had for his wife, a feeling so deep-rooted that fills him with the most beautiful hope of seeing her again. Rafael is not a man who likes to be in many pictures, but here he has allowed me to share one of those few where we are like that big family that we always wish to be ♥️.
The last photo is my property
Thank you for giving value to this publication with your time and attention.
See you soon.
Una de las cosas que desde muy niño me reproché, fue el no poder compartir mucho tiempo con mi abuelo. Y es que de aquellos lejanos recuerdos en mis primeros años de vida, aún tengo fresca la escena en la que cada tarde mi abuelo regresaba de su trabajo con una bolsa de pan y un litro de leche para compartir con todos sus nietos. Una experiencia tan hermosa como efímera que todavía guardo en mi corazón. Desde allí, siempre he sabido conectar y conocer a personas mayores que se han ganado mi afecto y cariño, pero si hay que hablar de uno en particular, ese es mi amigo Rafael.
Lo conocí hace algún tiempo gracias al cariño especial de su esposa, Olimpia, una señora ejemplar y que en su amor y atención sobresalía de manera sobresaliente. De hecho, yo era para ella un hijo, y ese sentimiento me acercó muy rápido a ellos. En muy poco tiempo nuestra amistad se estableció de forma especial, un vínculo que luego sufriría un duro golpe ante la muerte de Olimpia. Aquello fue una experiencia dolorosa para Rafael, pues tenía más de 50 años casado con quien había sido su única compañera de vida. Aquella trágica situación me hizo estar mucho más cerca de Rafael.
Una de las cosas que más me sorprendió de Rafael fue su manera de asimilar algo tan difícil como la muerte de tu cónyuge. Obviamente al principio fue muy duro, pero poco a poco él supo aferrarse a la esperanza de algún día volver a ver a su querida esposa. Y es que solo basta escucharlo hablar de ella, pues lo hace con una fe sólida y un amor que no se ha apagado a pesar de la tormenta. Incluso cuando charlamos dice cosas como "Algún día Olimpia y yo te invitaremos a pescar", y lo hace con una convicción digna de encomiar.
Rafael ya tiene más de 90 años, pero tiene un espíritu como de 15. Cada vez que hablamos me dice lo mucho que desea ir a acampar a la montaña, salir a pescar o simplemente comprar un Jeep e irnos a una zona de campo 😱🥰 En lo posible trato de compartir con él según sus posibilidades, ya que ahorita sufre de un dolor en su rodilla derecha, por lo que a veces hasta sus propias hijas deben frenarlo un poco para no exponerse a una caída o un esfuerzo que lo perjudique aún más.
Hablar con Rafael es como abrir una enciclopedia completa llena de historia, anécdotas y muchas experiencias. Es impresionante la capacidad que tiene para recordar hasta cuándo él tenía 12 años y vivía con sus padres en el campo. Le fascina la vida de agricultor, y por un tiempo tuvo una parcela donde podía cultivar. Después de lo ocurrido con su esposa y su malestar en la pierna sus hijas decidieron vender el terreno para aligerarle un poco sus ocupaciones, pero eso no fue ningún impedimento ya que empezó a cultivar su propio jardín en el patio de su casa 🥰🤩
Si la vida me da la oportunidad de vivir por tanto tiempo, Rafael para mí es esa figura en la que quisiera reflejarme. Un hombre trabajador, diligente hasta más no poder y siempre dispuesto a darte una mano, aunque esto implique un esfuerzo extra para él. Me encanta su visión de vida y como a su edad aún tiene proyectos y sueños por cumplir. Lo que más admiro de Rafael es ese amor genuino que siempre ha tenido por su esposa, un sentimiento tan arraigado que lo llena con la más hermosa esperanza de volverla a ver. Rafael no es un hombre de querer salir en muchas fotos, pero aquí me ha permitido compartir una de esas pocas donde salimos como esa gran familia que siempre deseamos ser ♥️.
La última foto es de mi propiedad.
Gracias por darle valor a esta publicación con tu tiempo y atención.
Hasta pronto.
Qué sensible y hermosa tu crónica en homenaje a esa persona de vida tan recia, de la que deberíamos aprender. Gracias por compartir. Saludos, @cajiro.
Una publicación que hace honor a una gran persona 🥰 Gracias por tu comentario amigo @josemalavem . Saludos 👋