Los azares del destino (Final) || [esp-eng]

Me complace nuevamente estar con todos ustedes compartiendo en esta ocasión la Parte Final de esta historia. Quiero agradecerles infinitamente el tiempo que se han tomado en hacerle seguimiento a este relato que fue dividido en tres publicaciones, espero que les haya sido de su agrado y la hayan disfrutado tanto como lo hice yo. Es de mucha alegría para mi su receptividad, de esta manera me motiva a seguir escribiendo y compartiendo con ustedes mas de mis escritos. Por eso una vez mas Gracias.

Sin mas, aquí les dejo con la conclusión de esta historia. Que la disfruten.

It pleases me again to be with you all sharing this time the Final Part of this story. I want to thank you infinitely for the time you have taken to follow up this story that was divided into three publications, I hope you liked it and enjoyed it as much as I did. It is a great joy for me your receptivity, this way it motivates me to continue writing and sharing with you more of my writings. So once again Thank you.

Without further ado, here I leave you with the conclusion of this story. Enjoy it.

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VERSION EN ESPAÑOL

      Eran aproximadamente las once de la noche cuando Efren y Don Manuel llegaron a la casa de Doña Ana y observaron al tío Joel en el porche intentando controlar a su mujer desesperada y angustiada. Al Efren y Don Manuel percatarse de la escena bajaron rápidamente de la camioneta y se dirigieron hacia donde estaban, éstos al verlos se asombraron ya que eran las últimas personas que podrían imaginarse que llegarían, era la primera vez que Don Manuel en sus tantos años de amistad familiar que tenía con su cuñada la había visto de esa manera, Doña Ana estaba al borde de la locura, desesperada y gritándole a su hijo que volviera, Don Joel no podía salir en búsqueda de su hijo, al menos no hasta que controlara a su esposa, Don Manuel preguntó qué era lo que había pasado y el porqué de la angustia a lo que Don Joel le respondió que su hijo Javier había venido acá y agarrado el arma de fuego que estaba en su cuarto y había salido como hombre que lleva el diablo a matar a un sujeto o a enfrentarse a varios, no lo sabía a ciencia cierta, lo que si es que esa noche su hijo iba a desgraciarse la vida.

      Efren no podía creer lo que estaba pasando ni mucho menos que hacer, solo observó la escena en donde su padre y su tío estaban intentando controlar a doña Ana bajo la luz tenue de un bombillo en las afueras de la casa, regresó a la camioneta y se paró frente a ella para poder divisar alguna silueta en la calle que le hiciera pensar que fuera Javier, pero no vio mas que luces sutiles y soledad, de pronto notó que un trio de personas corriendo cruzaron la calle y se dirigieron hacia donde él estaba y entraron directamente a la casa de Doña Ana, eran esas mismas personas que minutos atrás habían dejado cerca del estadio y el cual hablaban de la locura de su amigo, le dijeron a Don Joel que habían visto a Javier, su amigo, en las afueras del bar llevando consigo escondido un arma de fuego y que se disponía a esperar al causante de su mal para terminar de una vez por todas con la vida de ese sujeto.

      Efren al escuchar aquel relato corrió rápidamente hacia la camioneta, don Manuel lo siguió y le dijo a los muchachos que llegaron a la casa que se montaran y que los guiaran al bar donde se encontraba Javier, salieron a la máxima velocidad que le permitía aquella camioneta blanca y al llegar al sitio Efren bajo rápidamente del vehículo y al parecer sabía lo que iba hacer. Entró a aquel lugar e inmediatamente observó a Javier sentado en la mesa con una jarra de cerveza en la mano, se dirigió hacia él y al llegar, las primeras palabras que pronunció Efren a su primo fueron “entrégame el arma”, lo repitió una vez más pero con voz que denotaba mayor autoridad “entrégame el arma”. Javier sorprendido por aquella presencia y sin saber cómo reaccionar quedó enmudecido, sus ojos brotados, su mente se emblanqueció, su piel se tornó pálida y sus manos temblorosas, procedió a meter la mano entre su pantalón y la cintura y le entregó el arma. En ese instante Don Manuel llegó a la escena y cuando Javier lo observó, todos sus sentimientos de ira, rabia, miedo y vergüenza se mezclaron en un remolino de emociones, sus lágrimas empezaron a bajar por sus mejillas y procedió a llorar. Don Manuel al ver colapsar los sentimientos de Javier lo agarró de la mano y le dijo, “Vente hijo llegó el turno de irnos”.

      Nunca sabremos si aquel sujeto que iba a ser víctima de Javier llegaría a ese lugar, lo que sí es seguro es que Don Manuel, Efren y aquellos muchachos encontrados en el camino junto la estación de combustible llegaron primero y evitaron aquella locura que estaba decidido a cometer Javier. No podré decirles exactamente lo que Don Manuel y Efren le dijeron a Javier aquella noche en la que conversaron hasta la entrada del amanecer, lo cierto es que a partir de ese momento la vida de Javier cambió por completo, efectivamente un un hombre murió y un nuevo hombre nació en ese instante y fue Javier. Lo que pretendía ser un viaje en búsqueda de una oportunidad para Efren se convirtió en una nueva oportunidad que la vida le regaló a Javier.

      Quizás los azares del destino jugaron un papel importante en la travesía del viaje, desde aquel hombre extraño visto por Don Manuel aquella tarde en la plaza, que se accidentaran en par de ocasiones, de que la camioneta se parara justamente en un taller automotriz cuando los frenos ya no funcionaban, las horas que perdieron de viaje por esos incidentes o quizás más bien que ganaron al desviarse y llegar en el preciso momento a la estación de combustible y encontrarse con esos muchachos que al final los condujeron hacia el sitio en donde deberían haber llegado justo en el instante en que llegaron, todas estas acciones debieron ocurrir para que muriera un hombre y renaciera un nuevo ser con una perspectiva de vida distinta, libre de aquella ira y rencor que lo llevaron a desear terminar por sus manos la vida de un hombre.

      Ya han pasado muchos años de aquel angustioso momento, hoy Javier es dueño de uno de los talleres automotrices más importantes de su ciudad y aunque ya no vive en la misma localidad de sus progenitores, lo hace junto a su esposa y como padre de un par de hermosas niñas. De la vida de Efren solo diré que su contrato e inició en aquella empresa tardó más de dos años en hacerse realidad después del evento con Javier y actualmente es gerente general y uno de los lideres principales de aquella organización.

_{Pixabay By Erge}

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ENGLISH VERSION

      It was approximately eleven o'clock at night when Efren and Don Manuel arrived at Doña Ana's house and observed Uncle Joel on the porch trying to control his desperate and anguished wife. When Efren and Don Manuel noticed the scene they quickly got out of the truck and went to where they were, when they saw them they were astonished since they were the last people they could imagine arriving, it was the first time that Don Manuel in his many years of family friendship with his sister-in-law had seen her like that, Doña Ana was on the verge of madness, desperate and shouting to her son to come back, Don Joel could not go out in search of his son, at least not until he controlled his wife, Don Manuel asked what had happened and why the anguish to which Don Joel replied that his son Javier had come here and grabbed the firearm that was in his room and had gone out like a man with the devil to kill a guy or to confront several, he did not know for sure, what he did know was that that night his son was going to disgrace his life.

      Efren could not believe what was happening, much less what to do, he just watched the scene where his father and uncle were trying to control Doña Ana under the dim light of a light bulb outside the house, he returned to the truck and stood in front of it to see a silhouette in the street that made him think it was Javier, but he saw nothing but subtle lights and loneliness, Suddenly he noticed that a trio of people running across the street and headed towards where he was and entered directly to Doña Ana's house, they were the same people that minutes before had left near the stadium and which spoke of the madness of his friend, they told Don Joel that they had seen Javier, his friend, outside the bar carrying a hidden gun and that he was ready to wait for the cause of his evil to end once and for all with the life of that subject.

      Don Manuel followed him and told the boys who arrived at the house to get in and guide them to the bar where Javier was, they left at the maximum speed allowed by that white van and when they arrived at the place Efren quickly got out of the vehicle and apparently knew what he was going to do. He entered the place and immediately observed Javier sitting at the table with a beer mug in his hand, he went towards him and when he arrived, the first words Efren pronounced to his cousin were "give me the gun", he repeated it once more but with a voice that denoted greater authority "give me the gun". Javier, surprised by that presence and not knowing how to react, was speechless, his eyes bulged, his mind went white, his skin turned pale and his hands trembled, he proceeded to put his hand between his pants and waistband and handed him the gun. At that instant Don Manuel arrived on the scene and when Javier looked at him, all his feelings of anger, rage, fear and shame mixed together in a whirlwind of emotions, his tears began to flow down his cheeks and he proceeded to cry. Don Manuel seeing Javier's feelings collapse grabbed him by the hand and said, "Come on son, it's time to go".

      We will never know if that guy who was going to be Javier's victim would reach that place, what is certain is that Don Manuel, Efren and those boys found on the road next to the gas station arrived first and avoided that madness that Javier was determined to commit. I can't tell you exactly what Don Manuel and Efren said to Javier that night when they talked until the break of dawn, what is certain is that from that moment on Javier's life changed completely, effectively one man died and a new man was born at that instant and that was Javier. What was intended to be a journey in search of an opportunity for Efren became a new opportunity that life gave Javier.

      Perhaps the vagaries of fate played an important role in the journey, from that strange man seen by Don Manuel that afternoon in the plaza, to the fact that they had a couple of accidents, to the fact that the truck stopped at a garage when the brakes no longer worked, the hours they lost on the trip because of those incidents, or perhaps more likely they gained by taking a detour and arriving at the precise moment at the gas station and meeting those boys who in the end drove them to the place where they should have arrived just as they arrived, all these actions must have happened for a man to die and a new being to be reborn with a different perspective on life, free of that anger and resentment that led him to want to end a man's life by his own hands.

      Today Javier owns one of the most important automotive repair shops in his city and although he no longer lives in the same town as his parents, he does so with his wife and as the father of a couple of beautiful girls. Of Efren's life I will only say that his contract and initiation in that company took more than two years to become a reality after the event with Javier and today he is the general manager and one of the main leaders of that organization.