Fuente/Source
Español
Cacería (continuación)
El trayecto que siguieron los llevó a través del mismo riachuelo que habían cruzado antes, pero en un lugar donde era aún más ancho y caudaloso, si bien las armaduras les daban una gran ventaja a la hora del combate, resultaban muy poco convenientes al momento de encontrarse con el agua, pues se hundían como rocas y peor aún en el caso del modelo que usaban, pues no era hermético, así que les entraba el agua por todas partes.
Dispararon una línea usando un arpón, que se enganchó en uno de los árboles al otro lado del río y la usaron como guía para mantener el equilibrio al cruzar, Petersen encabezó la fila y fue seguido por los otros tres hombres a poco más de un metro de distancia uno del otro, caminaron sujetos del cable que habían tensado y atado a un árbol.
No habían avanzado más de dos metros, cuando ya prácticamente colgaban del cable con sus brazos extendidos hasta arriba, con el agua llegándoles a la altura del pecho.
—Si seguimos así tendremos que soltarnos —dijo Vielma, que seguía al sargento en la fila.
—Ya estamos casi a la mitad del recorrido, espero que no se haga más profundo —dijo Petersen, mientras se aferraba con sus dedos como garras al delgado pero firme cable. —Si nos soltamos, seremos arrastrados por la corriente, y con estas armaduras no podremos nadar, nos vamos a hundir como rocas.
Continuaron, y para su fortuna, la profundidad fue disminuyendo y a medida que avanzaban, hasta llegar casi a la otra orilla, cuando repentinamente la línea se cortó tras ellos, Petersen, Vielma y Benítez que iban adelante lograron mantenerse en pie ante la corriente, pero Norton, que estaba aún con el agua a la altura del abdomen, trastabilló y cayó, arrastrado por la fuerte corriente, se mantuvo aferrado al cable, mientras Benítez le extendía la mano para ayudarlo a levantarse.
—Dame la mano Norton —gritó Benítez, mientras Norton, con una mueca en el rostro, se aferraba al cable, mientras intentaba avanzar caminando contra la corriente, para alcanzarlo.
Logró avanzar unos pasos, cuando de la nada, el ya conocido zumbido de un proyectil, pareció reverberar sobre el ruido del río. Repentinamente, la mueca en el rostro de Norton desapareció, cuando su visor fue destrozado por el impacto de un disparo, que despedazó su cabeza.
El cuerpo de hombre, permaneció aferrado al cable durante algunos pocos segundos más, mientras era tirado por la corriente, como si se tratara de una veleta ondeando al viento, mientras los restantes miembros del equipo, aún desconcertados, trataban de mantenerse en pie, ante el peso extra que los arrastraba. Finalmente, la armadura perdió potencia y el cuerpo sin vida de Norton se soltó y fue arrastrado por la corriente, hasta unas rocas, unos diez metros más adelante, donde quedo atascado, sumergido en el agua.
Petersen, Vielma y Benítez, terminaron de cruzar el río y se resguardaron al amparo de los árboles. Habían quedado completamente expuestos durante varios segundos, ante aquella maldita máquina, y solo mató a uno de ellos, al que estaba en una peor posición. Sentían como si fueran perseguidos por algún tipo de cazador, que simplemente se divertía a cuenta de ellos, decidiendo a quien matar y cuando era el mejor momento para hacerlo.
English
Hunting (continued)
The route they followed took them through the same creek they had crossed before, but in a place where it was even wider and more abundant, although the armor gave them a great advantage in combat, it was very inconvenient when they encountered the water, as they sank like rocks and even worse in the case of the model they used, it was not watertight, so the water came in everywhere.
They shot a line using a harpoon, which caught on one of the trees on the other side of the river and they used it as a guide to keep their balance when crossing, Petersen led the line and was followed by the other three men a little more than a meter away from each other, they walked holding on to the cable they had tightened and tied to a tree.
They had not gone more than two meters, when they were practically hanging from the cable with their arms stretched all the way up, with the water coming up to their chests.
-If we go on like this we'll have to let go," said Vielma, who was following the sergeant in line.
-We're almost halfway down, I hope it doesn't get any deeper," said Petersen, as he gripped the thin but firm cable with his claw-like fingers. -If we let go, we'll be swept down with the current, and in this armor we won't be able to swim, we'll sink like rocks.
They continued, and to their good fortune, the depth was decreasing and as they advanced, until they almost reached the other shore, when suddenly the line was cut behind them, Petersen, Vielma and Benitez who were ahead managed to stand up against the current, but Norton, who was still with the water at the height of his abdomen, staggered and fell, dragged by the strong current, he held on to the cable, while Benitez extended his hand to help him to get up.
-Give me your hand Norton," shouted Benitez, while Norton, with a grimace on his face, clung to the cable, while he tried to walk forward against the current, to reach him.
He managed to advance a few steps, when out of nowhere, the now familiar buzz of a projectile seemed to reverberate over the noise of the river. Suddenly, the grimace on Norton's face disappeared as his visor was shattered by the impact of a shot that shattered his head.
The man's body remained clinging to the cable for a few more seconds as it was pulled by the current, as if it were a weather vane flapping in the wind, while the remaining team members, still bewildered, tried to stand upright against the extra weight that was dragging them down. Finally, the armor lost power and Norton's lifeless body broke free and was dragged by the current to some rocks, some ten meters ahead, where it was stuck, submerged in the water.
Petersen, Vielma and Benitez finished crossing the river and took shelter under the trees. They had been completely exposed for several seconds before that damned machine, and it only killed one of them, the one who was in the worst position. They felt as if they were being chased by some kind of hunter, who was simply having fun at their expense, deciding who to kill and when was the best time to do it.