En esta oportunidad, el ambiente y la declamación estuvieron simplemente impecables. Se sintió esa lucha por querer escapar de algo que siempre llega, que siempre te alcanza.
cometía el pecado ruido
de preguntarme
que habría sido
de su nombre.
Recuerdos buenos y profundos que nos deja la vida y otros que sencillamente deseamos olvidar a toda costa.
así es, recuerdos repulsivos, momentos de tormento, gracias por el apoyo y la actividad.