Es complicado definir al amor ¿cierto?. Cómo definir ese sentimiento que generalmente suele desencadenar una explosión de emociones que de alguna u otra manera nos genera felicidad, o al menos en teoría es así... Creo que la gran mayoría crecimos con esa expectativa de película de encontrar a esa esa persona especial, así de la nada, tipo que vas cruzando la calle, lo miras, él te mira y ¡bum! amor instantáneo. Mucho se ha escrito sobre el amor, miles de libros están dedicados a contar épicas historias donde los enamorados son capaces de todo, con tal de defender su amor. Igualmente dentro del mundo de la poesía cuanto no se le ha dedicado a este sentimiento. Lo cierto es que en la vida real las cosas no suelen funcionar de ese modo. Es por eso que incluso la ciencia a buscado darle explicación a ese coctel de emociones y sensaciones que genera en un individuo eso que denominan amor, sip leyeron bien, existe la ciencia del amor, pero de eso hablaremos mas adelante.

Cuando era muy pequeña mis padres se separaron, de un día para otro mi papá decidió partir de casa, yo a mi corta edad no comprendí muy bien la situación. Paso el tiempo y mi mamá volvió a casarse, este señor se gano mi cariño y respeto, al punto de considerarlo un padre para mí. De esta relación nació mi primera teoría sobre el amor. Para mi el amor verdadero se encontraba en mi cotidianidad, la relación de mis padres siempre fue algo que admiré, me gustaba fantasear con que algún día si me casaba, mi familia sería igual.

Para cuando cumplí los 10 años mi papá enfermo y meses mas tarde murió dentro de un quirófano durante una operación a corazón abierto. Aún recuerdo ese día, mi mamá llegó a casa, me abrazó y entre lagrimas me dió la noticia, me extraño bastante puesto que mi mamá es de las personas que no demuestra nunca sus sentimientos, verla llorar de ese modo para mí fue desgarrador. El tiempo pasó, pero mi mamá jamás volvió a ser la misma, quizá no era algo muy notorio, pero con mis cortos 10 añitos lo podía percibir, esa energía y esa especie de chispa que tenía cuando estaba con papá jamás la he vuelto a ver con otra persona. Años después comenzaron a surgir muchas preguntas dentro de mi cabeza ¿Qué hace que dos personas se "enamoren"? ¿Por qué el amor se acaba? ¿Por qué unas parejas funcionan y otras no? ¿Qué es eso tan terrible que acaba con el amor?...

Mas adelante a medida que fui creciendo amores fueron y amores vinieron, pero supongo que nunca surgió esa chispa o esa conexión de la que tanto se habla cuando te dicen "Estas Enamorado", quizá no entendía el amor, o no tenía la misma percepción que tengo hoy en día, también es posible que sí lo haya sabido interpretar, pero el miedo o la inmadurez no me dejaron ver más allá. Recuerdo que cuando tenía como 9-10 años vivíamos en un departamento, yo siempre me la pasaba con un niño que vivía en el piso de arriba, en ese entonces me parecía el niño mas lindo del mundo, y pasar tiempo con él era algo que disfrutaba. Nuestros balcones estaban dispuesto hacia el mismo lado, así que cuando él no podía venir a mi casa, ni yo a la de él, bajaba por las rejas del balcón y se sentaba allí para poder hablar conmigo. Como era de esperarse mi familia comenzó a echarnos broma de que pasábamos tanto tiempo juntos que ya parecíamos novios, sin embargo nosotros siempre contestábamos lo mismo, "solo somos amigos". Tiempo después me tocó mudarme de ese edificio y con el pasar de los días dejamos de vernos tan seguido hasta que perdimos el contacto por completo. Así que podemos decir que esta fue la primera vez que se rompió mi corazón.

De allí en adelante, continúo (así como diría una de mis tías), besando sapos hasta encontrar al príncipe. Aunque eso del príncipe, en mi opinión, es bastante cuestionable y un poco absurdo la verdad. Con el tiempo he notado que no se trata de encontrar al príncipe azul perfecto que rescate a la princesa, tampoco es andar por la vida buscando esa otra mitad que según todo el mundo te hace falta. Según mi teoría la cuestión esta en conseguir a alguien que te complemente, que te haga ser mejor persona cada día, que acepte y valore tus virtudes, pero también tus defectos, cosa que debe ser recíproco. Para mi el secreto esta en que entre ambos puedan ir construyendo y alimentando eso que las personas denominan "amor". Porque si algo me enseño la experiencia, es que eso de sentir "amor a primera vista" es la parte sencilla del asunto, lo verdaderamente difícil es mantener ese amor a largo plazo.

Lo anterior lo digo basado en mi criterio personal, pero como les dije al principio la ciencia tiene una teoría bastante interesante. En general todos tenemos nuestra propia perspectiva del amor, pero mas allá de versos e historias sobre amor, es interesante conocer la parte fisiológica, es decir, como reacciona nuestro organismo, cada vez que piensas en esa persona especial y comienzas a sentir maripositas en el estómago. Creo que a todos nos han dicho alguna vez la típica frase de "¿Y a ti que te pasa?, tú como que andas enamorado" cada que andamos así como medio despistados; y ciertamente no están equivocados, de hecho, estudios demuestran que estar "enamorado" tiene un gran impacto en nuestra vida, por lo general solemos cambiar el humor e incluso hasta el comportamiento.

Desde el punto de vista antropológico el amor puede considerarse una forma de adaptación, que tiene como fin asegurar la descendencia y el cuidado de las crías durante los primeros años de vida. En cuanto a la parte química tenemos que cuando las personas se encuentran en esa fase de "enamoramiento", ya saben cuando se están conociendo, y ya comienzas a notar que esa persona te llama la atención mas de lo normal, que pasar tiempo juntos te genera una inexplicable sensación de bienestar y felicidad. Esta felicidad es generada por una serie de neurotransmisores que crean una especie de coctel en tu cerebro básicamente haciendo que focalices toda tu atención en él o ella convirtiéndolo en el centro de tu mundo. El único objetivo a partir de ese momento es conseguir que también te preste toda su atención y, en líneas generales no ser rechazado. Esta coctelito es muy similar al que se genera cuando se consume cocaína, es decir, que técnicamente comienzas a tener una especie de adicción hacia esa persona.

Amar y desear no es lo mismo. Es cierto en un principio lo que nos mueve es el deseo, pero desear a alguien no siempre va ligado a amarle. Entonces supongo que se estarán preguntando, ¿el deseo genera amor?, y la respuesta es si y no. Digo es posible que después de un tiempo ese deseo llegue a ser amor, pero aquí es donde volvemos a lo que les decía al principio, ¿Cómo haces para que de ese deseo pueda surgir algo mas?. Y existen muchas variantes, porque como se los explique anteriormente básicamente te vuelves adicto a esa persona, bueno realmente es a la respuesta química que genera esa persona en tu cerebro, eso que te hace sentir a gusto, pero (siempre existe un pero) esto puede terminar en algo toxico. Si esa "adicción" se vuelve obsesiva y comienzas a sentir que no estas teniendo toda la atención del otro, la obsesión puede abrirle el paso a los celos. Evolutivamente se cree que los celos surgen por distintas razones en ambos sexos. En las mujeres la cosa va por el miedo de tener que criar a los hijos solas, y en los hombres por el miedo a criar hijos de otro. Lo cierto es que por mucho que la ciencia intenta dar una explicación a esto, pueden existir un millón de perspectivas distintas para este tema.

En este asunto existen varias teorías. Ciertas investigaciones arrojan que el ser humano es monógamo por naturaleza, pero, por un periodo de tiempo. Me explico mejor, instintivamente no buscamos tener múltiples parejas al mismo tiempo, sin embargo, por cuestiones de mantener la variabilidad genética cada cierto tiempo buscamos cambiar esa pareja. Generalmente existe una tendencia a reiniciar el ciclo cada cierto tiempo, volver a sentir ese cóctel que genera el periodo de enamoramiento. Viéndolo desde este punto de vista, tiene sentido lo que les comente al principio, quizá el secreto esta en encontrar la forma de repetir ese ciclo una y otra vez pero con la misma persona. Lograr que aunque pase el tiempo nuestros neurotransmisores pasen muchas veces por los mismos estados, hablando mas coloquialmente mantener la llama del amor viva. Pero sinceramente, esto suena muy a final de cuento de hada "Y vivieron felices para siempre".

Me llamó muchísimo la atención leer sobre este tema desde el punto de vista científico, sin embargo, la ciencia dice mil cosas, propone miles de teorías, pero al final solo entiende este sentimiento aquel que lo ha vivido en carne propia, porque al final a nadie le importa realmente de donde vienen esas maripositas en el estómago, solo sabemos que se sienten muy bien.