¡WOW!

Así empiezo, con un gran WOW, y es que se debe a que fue una experiencia increíble. Fue un viaje planeado con varios meses de anticipación debido al tiempo, dinero y disponibilidad de los asistentes. Aparte de que lleva una logística para tratar de que no se escapara nada y que fuese totalmente placentero.

Este hermoso viaje comenzó con la idea de reencontrarme con una amiga que no veía desde hace 8 años aproximadamente, ya que vivimos en países diferentes debido a la migración que hicimos cada una en su momento desde nuestra hermosa Venezuela.

Ambas mantenemos una muy buena y sana relación de amistad desde que nos conocimos, yo fui su jefa en algún momento y luego ella me daría clases de otros temas, de verdad que siento que nos conectamos, es una amistad que desde un inicio fue rica, sincera y de excelente calidad.

Paréntesis

Mi Juliet, es una de esas amistades que quieres y se hace conservar. Es elocuente, super inteligente, super familiar, siempre busca motivarse y motivar a los demás, es una persona que te apoya en todo momento y a la que no se le agotan los recursos para hacerte saber que está allí, disponible para todo momento (buenos y no tan buenos) y es tan transparente como yo suelo ser. Dicen que cuando valoramos o elogiamos algo de los demás es porque nos vemos reflejados, porque percibimos ciertas cualidades propias en ellos y vaya que sí lo siento así.

Para nosotras, la distancia no ha sido impedimento para mantener nuestra amistad, creo que la ha reforzado, cada una desde su posición y circunstancia ha sabido estar para la otra, algunas veces reímos, otras tomamos café, otras veces tomamos un vinito para celebrar o simplemente para compartir un trago y hablar de nuestras vidas y experiencias. Otras veces lloramos y nos aupamos para sacarnos de estados de mucha tensión, y muchas otras para darnos compañía y planificar viajes. Esto lo amamos, entre las dos nos damos ideas del próximo destino y damos consejos de viaje.

Continúo

Como dije al principio, este hermoso viaje tuvo mucha planificación y es que cuando llegó el día de volar al destino fue increíble. Soy de marcar en el calendario los días que van pasando, siento que lo hace especial porque sin duda lo es para mí y el ir descontando los días me hace querer más vivir la experiencia.

El tan esperado día de vuelo llegó y tuve que ir temprano al aeropuerto, el viaje duró aproximadamente 3 horas y debo confesar que amo volar, siento una gran satisfacción al ir por ese pasillo a abordar y luego en el avión, es una experiencia tan agradable. Vale recalcar que este viaje lo hice sola y en un principio pensé que no lo lograría pero al llegar el momento me sentía tan preparada, tan capaz, tan independiente que me sorprendí.

El vuelo

Debo mencionar que tanto el despegue como el aterrizaje siempre dan un poco de temor y se siente un vacío en el estómago tremendo, pero aún así me encanta volar y ya lo estoy tomando como más relajada, siempre rezándole a Dios para que todo salga bien tanto por mi como por todos los pasajeros y tripulación obviamente. Y bueno, durante el vuelo aproveché de dormir ya que me había levantado super temprano, llegué a Bogotá y de allì debía esperar el otro vuelo hasta Cartagena de Indias, ese viaje era más corto y aunque salía en la tarde felizmente pude ver el cielo de esa hermosa ciudad, los colores son tan vibrantes, el azul del cielo y sus matices, el mar, las olas PUFF la vista desde el aire es inmejorable, de verdad. Las nubes, el contraste en el cielo por los colores del atardecer, WOW que belleza, que bella la naturaleza.

En cuanto bajé del avión me comuniqué con mi amiga quien ya había llegado en compañía de su esposo y los esperé en el aeropuerto, ya que luego llegaban sus padres, tía y suegra, con quienes había compartido anteriormente así que reencontrarnos fue muy gratificante y agradable también. Mientras la esperaba hice un cartel, así como un identificador, no decía exactamente su nombre pero sí un nickname que usamos HOLA BEBÉ, qué risa de verdad, yo reía por mi travesura y ella también por lo chistoso del momento. Al verla fue tan bonito, se llena como un vacío que no sabía que tenía, algo difícil de explicar, creo que nos pasa a todos los migrantes, ese reencuentro con un ser querido tan cercano y con el cual llevabas varios años sin verse face to face, obviamente hubo lágrimas de alegría y como no derramarlas.

Estando allí en el aeropuerto tomamos café, uno de los más conocidos, Juan Valdez, pedazo de café pa’ bueno. Conversamos sobre los vuelos y los retrasos ya que había mal tiempo, mientras tanto esperábamos a su familia, quienes no demoraron en aterrizar ya que nuestros vuelos tenían pocas horas de diferencia. Nos encontramos y fuimos al hotel donde nos hospedaríamos todo el viaje, fuimos a cenar, echamos cuentos y nos fuimos a dormir.

Ese día en la cena tuvimos una atención inmejorable para el momento, la comida divina, su presentación única y el personal super apasionado en la atención al cliente puesto que llovía a cántaros y uno de los chicos que labora allí nos ayudó con su paraguas a cruzar la calle hacia el hotel y nos llevó uno por uno. Obviamente en el camino se mojó completamente y de verdad que fue inesperado ese gesto y super agradecidos con él.

Hasta aquí llega esta primer parte. Les comparto unas cuantas fotos del viaje, hay muchísimas sólo que en esta ocasión subiré algunas, espero las disfruten.

¡WOW!

That's how I begin, with a big WOW, and it's because it was an incredible experience. It was a trip planned several months in advance due to time, money, and availability of the attendees. Besides, it requires logistics to try to make sure nothing was missed and that it was completely enjoyable.

This beautiful journey started with the idea of ​​reconnecting with a friend I hadn't seen for about 8 years, as we live in different countries due to the migration we each made from our beautiful Venezuela.

We both maintain a very good and healthy friendship since we met, I was her boss at some point and then she would give me classes on other subjects, really I feel like we connect, it's a friendship that from the beginning was rich, sincere and of excellent quality.

Parenthesis

My Juliet is one of those friendships you want to keep. She is eloquent, super intelligent, very family-oriented, always looking to motivate herself and others, she is someone who supports you at all times and who never runs out of resources to let you know that she is there, available for every moment (good and not so good) and she is as transparent as I tend to be. They say that when we value or praise something in others it is because we see ourselves reflected, because we perceive certain qualities in them that we have ourselves, and boy do I feel that way.

For us, distance has not been an impediment to maintaining our friendship, I think it has reinforced it, each one from her position and circumstance has known how to be there for the other, sometimes we laugh, other times we have coffee, other times we have a glass of wine to celebrate or simply to share a drink and talk about our lives and experiences. Other times we cry and support each other to get out of states of high tension, and many other times just to keep each other company and plan trips. We love this, between the two of us we come up with ideas for the next destination and give travel advice.

Continuing

As I said at the beginning, this beautiful journey required a lot of planning, and when the day to fly to the destination finally arrived, it was incredible. I like to mark the days on the calendar as they go by. It makes it special because it definitely is for me, and counting down the days makes me want to experience it even more.

The long-awaited day of the flight arrived, and I had to go to the airport early. The trip lasted approximately 3 hours, and I must confess that I love flying. I feel a great satisfaction walking down that aisle to board and then being on the plane. It's such a pleasant experience. It's worth mentioning that I did this trip alone, and at first, I thought I wouldn't be able to do it. But when the moment came, I felt so prepared, so capable, so independent that I surprised myself.

The flight

I must mention that both takeoff and landing are always a little scary. There's a tremendous emptiness in the stomach. But still, I love flying, and I'm taking it more relaxed now. I always pray to God that everything goes well, for me, and for all the passengers and crew, of course. Well, during the flight, I took the opportunity to sleep since I had woken up very early. I arrived in Bogota, and from there, I had to wait for the next flight to Cartagena de Indias. That journey was shorter, and even though it departed in the afternoon, I was happily able to see the sky of that beautiful city. The colors are so vibrant, the blue sky and its shades, the sea, the waves. Wow, the view from the air is unbeatable, really. The clouds, the contrast in the sky due to the colors of the sunset. What beauty, what a beautiful nature.

As soon as I got off the plane, I contacted my friend, who had already arrived with her husband, and I waited for them at the airport because her parents, aunt, and mother-in-law were arriving later, who I had previously shared time with. So reuniting with them was very rewarding and pleasant as well. While I was waiting, I made a sign, like an identifier. It didn't say her exact name, but a nickname that we use: HI, BABY. It was so funny, I laughed because of my mischief, and she laughed too because of how funny the moment was. Seeing her was so beautiful. It filled a void that I didn't know I had. It's something difficult to explain, I think it happens to all migrants, that reunion with a loved one who is so close and with whom you haven't seen face to face for several years. Obviously, there were tears of joy, and how could we not shed them?

While we were at the airport, we had coffee at one of the most famous places, Juan Valdez. It was a great cup of coffee. We talked about our flights and the delays due to bad weather, meanwhile, we waited for her family, who didn't take long to land since our flights had only a few hours of difference. We met them and went to the hotel where we would stay for the entire trip. We went to dinner, had conversations, and went to sleep.

That evening at dinner, we received excellent service. The food was divine, with a unique presentation, and the staff was super passionate about customer service. It was pouring rain, and one of the guys who worked there helped us cross the street to the hotel with his umbrella, taking care of each one of us. Obviously, he got completely wet on the way, and it was truly an unexpected gesture. We were extremely grateful to him.

That's it for this first part. I'm sharing a few photos of the trip. There are many, but this time I'll upload some. I hope you enjoy them.