Felicitaciones @lecumberre ; como siempre, llegas al corazón con tus escritos, ya sean en prosa o en verso. La situación de tu amigo no es muy diferente a la de muchas personas que llegan o pasan de las seis décadas, especialmente si se casan con la soledad; y esta soledad suele presentarse si no construimos nuestro entorno-presente desde jóvenes, sobre todo si tenemos una pareja y, más aún, si tenemos hijos. A los sesenta, es inevitable que valoremos el tiempo transcurrido y pensemos en el camino que falta por recorrer; quienes entran en la contemplación del pasado y se juzgan y se condenan, caen en depresión y quienes se empeñan o se frustran por no encontrar puertas abiertas en el corto o mediano plazo del futuro entran en ansiedad. Como docente, insistí en este tema con mis estudiantes del bachillerato y los de la universidad, igual con mis hijas y algunos de mis amigos y familiares (sobrinos o ahijados) para que se empeñaran con toda su alma en construir su mejor presente, si querían reir y disfrutar la vida cuando cumplieran ochenta años. Saludos poetas y narradores, desde Caracas, tierra de los gloriosos Leones.