La retro Estoica del tío Andrés(es/en)

                VERSION EN ESPAÑOL

Hola a todos en esta comunidad a la que ya me he habituado a publicar y a competir.

Saludos a todos los que entran en esta nueva oportunidad semanal de Observa, Piensa y Escribe.

Mis antepasados son descendientes y conservadores de la escuela antigua de los estoicos que tuvieron su mejor momento allá en la Grecia clásica y esplendorosa.

Guardamos esa tradición y sus postulados a la manera de los caballeros templarios los caballeros de la mesa redonda o los masones.renfirse o claudicar no aparece en nuestro vocabulario y mucho menos quejarse o lamentarse tiene cabida entre nosotros.

Nuestra filosofía se asemeja al eslogan de los Vikingos cuando iban

a la guerra, y las madres le decían a sus hijos que solo podían regresar “sobre el escudo o bajo el escudo”.
O sea, muerto o victoriosos , nunca derrotados

Es una cruel concepción, pero es un legado de ética.

Es por eso que entendí rápidamente lo que sucedía a ver la maquinaria de mi tío Andrés atravesada en el camino. Un mensaje sublimar que solo los miembros de la secta podemos descodificar de un solo vistazo

¡Allí, en la postura de aquella mole de hierro, vi dramáticamente la imagen de mi pariente, arrodillado y con la cabeza entre las piernas pidiendo estoicamente: que alguien me ponga sobre el escudo!

Entonces recordé aquella mañana cuando el batallón formado. ¡Cada operador con el pie derecho sobre el estribo de su equipo y los pechos inflamados de orgullo y entusiasmos, a una sola voz gritaron enaltecido por la certeza: juramos!.

Se habían comprometido con que el trasvases estaría concluido para una fecha determinada y las circunstancias no lo permitieron.

¡Yo, que lo entendí todo, saqué mi celular del bolsillo, busque en los contactos y avisé a los pocos, muy poquitos herederos de la sexta, que el tío Andrés volvía bajo el escudo!
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             VERSION IN ENGLISH

Hello to everyone in this community to which I have become accustomed to
posting and competing.

Greetings to all who enter this new weekly Watch, Think and Write opportunity.

My ancestors are descendants and preservers of the ancient school of the Stoics who had their best moment back in classical and splendorous Greece.

We keep that tradition and its postulates in the manner of the Knights Templar, the Knights of the Round Table or the Freemasons. Giving up or giving in is not in our vocabulary and even less complaining or lamenting has no place among us.

Our philosophy resembles the slogan of the Vikings when they went to war, and the mothers told their sons that they could onlyto war, and the mothers told their sons that they could only return "on the shield or under the shield".
In other words, dead or victorious, never defeated.

It is a cruel conception, but it is a legacy of ethics.

That is why I quickly understood what was happening when I saw the machinery of my uncle Andrés crossed on the road. A sublimar message that only the members of the sect can decode at a glance.

There, in the position of that iron mass, I saw dramatically the image of my relative, kneeling and with his head between his legs stoically asking: somebody put me on the shield!

Then I remembered that morning when the formed battalion, each operator with his right foot in the stirrup of his team and his breasts swollen with pride and enthusiasm, shouted with one voice, exalted by certainty: we swear!

They had promised that the transfer would be completed by a certain date, but circumstances did not allow it.

I, who understood everything, took my mobile phone out of my pocket, searched the contacts and informed the few, very few heirs of the sixth that Uncle Andrés was returning under the shield!

Texto traducido con Deelpp Traslator.