¡Por fin es lunes! Después de una semana sin publicar estamos de regreso. Me he tomado algunos días para concentrarme en escribir y adelantar trabajo. Después de los días de inicio de año por fin podemos volver a un espacio y rutinas de tiempo que me permiten estar más activo por acá con actualizaciones cada tanto. Tanto mi perfil como mi blog van a estar agradecidos.

El hecho de escribir de forma diaria también es positivo. Es motivante. Se convierte en un hábito y al cumplirlo, alguna casilla imaginaria se está marcando con un estímulo cerebral que es reconfortante.

Esta mañana he pasado a visitar a uno de mis clientes. Un Youtuber emergente que necesita un poco de ayuda con la actividad de sus redes sociales para promocionar su contenido. La visita fue breve. A veces solo tienes que planificar, acordar ideas y el resto se hará realidad cuando te encuentras con la jornada de trabajo a solas.

Estoy intentando llevar mi cámara conmigo todos los días. Con el inicio de año y el periodo de 1 Día 1 Post también asumí el hecho de generar fotos a diario. En el día a día, a veces esto suele ser un problema, más que todo por cuestiones de practicidad.

No es lo más sano llevar tu cámara siempre en la mochila, ya que las condiciones de clima, los otros objetos, o cualquier situación externa podrían provocar un hecho no muy agradable para la cámara. Por otro lado, tienes el contra de la movilidad y el hecho de tener que cargar objetos (como tu cámara) todo el tiempo.

Soy una persona que disfruta el caminar, y a veces la mochila puede suponer una molestia.

Fuera de todas las complicaciones de mi reto semanal, siempre está la recompensa de tener tu herramienta para capturar momentos. Esto es en casa de uno de mis clientes. Su living estaba inundado con una luz increíble. Perfecto para sacar una foto.

Más tarde he pasado a visitar a algunos amigos, en su living me encontré a uno de los mejores huéspedes de la casa. Se trata de Luis XIV. Un gato de increíble personalidad y estilo. Gracias al hecho de tener la cámara en la mochila no pude evitar retratar a este amigo dando una pequeña siesta.