La excelencia, es la característica de ser bueno, de hacer las cosas de manera óptima.
Cuando somos excelentes, hacemos las cosas bien sin ninguna excusa, sobresalimos de la mediocridad, estamos por delante de los que hacen todo “a medias”.
La excelencia nos impulsa a ser mejores cada día, y no por competir con otros, sino por ponernos en reto a nosotros mismos para crecer, para llegar más lejos.
Pero, si algo es cierto, es que solamente seremos excelentes en lo que amamos, en lo que nos apasiona… No podremos ser buenos cuando no nos sentimos motivados a serlo, no podrás ser bueno cuando haces en tu vida lo que realmente no quieres hacer.