Acostumbro a hacer pequeños tutoriales todos los sábados con consejos y tips sobre el dibujos, aún con responsabilidades un poco más grandes me daba mi tiempo para redactar y argumentar de forma concreta mis entradas, pero desafortunadamente esta semana que pasó no me dio tiempo para hacerlo, no lo conseguí y siento que rompí esa línea por no haber escrito nada el día de ayer, además de que no me dio la cabeza tampoco para estructurar el tema del que pretendía hablar, o enseñar; pero bueno pa' lante
Hoy no hay tutoriales, pero si traje conmigo muchas ganas de compartir con ustedes (quienes me lean, y hasta con quienes no) lo gratificante o lo significativo que ha sido el dibujo en mi vida, desde que tengo conciencia y puedo discernir de todo lo que me rodea.
Tengo 21 años de edad, y he venido tocando los lápices de dibujo desde hace casi 18 años, puesto que en mi niñez debatía mi tiempo entre dibujar y ver Dragon Ball Z, mayormente fusionaba ambos y terminaba dibujando a Gokú, con la siempre presente ayuda de mi mamá, incluso una vez llegamos a dibujar a los Teletubbies. Es gracioso porque, entre dibujar a esos personajes, individualmente me gustaba muchísimo dibujar virgenes, santos y a Jesucristo, tanto así que mi mamá pensaba que de mayor sería cura (muy irónica mi realidad, que de católico no tengo nada y tengo mi fe puesta en otras cosas más espirituales) incluso actualmente disfruto dibujar vírgenes, más por las técnicas y la delicadeza de sus figuras que por otras razones. Lastimosamente, de esos dibujos no quedó nada, gracias a las lluvias y techos con goteras MUY grandes que dañaron esos cuadernos repletos de dibujos. Lamentable.
Conforme fui creciendo, nunca abandoné el dibujo, lo hice parte de mi vida: regalos a mis padres, cartas al niño Jesús en Navidad, ratos de ocio infantil en dibujar a Cristo, Spiderman, Gokú y pare usted de contar personajes de ficción. Era divertido. En las clases de primaria era fanático de las clases donde debía dibujar, bien sea a los próceres, representaciones gráficas de las batallas, cuadros, personajes, plantas, el cuerpo humano, el sistema digestivo, los órganos; en fin, todo lo que se pidiera dibujar, lo hacía con mucha pasión, fuera lo que fuera. En la secundaria aún seguía renuente con eso, dibujando personajes de mis videojuegos favoritos, e incluso en los últimos años antes de graduarme, en colaboración de mis compañeros hicimos un mural sobre la institución. Toda mi vida, reflejada con lápices y colores.
Actualmente estudio ingeniería en telecomunicaciones como algunos sabrán, pero el desarrollo, el crecimiento, la constancia, la paciencia que he tenido con el dibujo, las ganas de estar siempre queriendo dibujar a cada momento me han hecho entender que nací para dibujar. Nunca he hecho un curso de dibujo, todo ha sido partiendo de lo empírico y muy personal. No pretendo dejarlo para nada, porque uno debería quedarse en los lugares donde hay felicidad, y si hay que salir de ahí, que sea para conseguir más felicidad todavía. No pretendo desistir, y espero que alguna persona que le guste dibujar me lea y que entienda que no, no debe rendirse, no debe dejar de dibujar a pesar de lo que sea, no hay fuerza mas grande que la voluntad de hacer las cosas.
Por aquí les muestro unos cuantos de mis dibujos:
Si quieren ver más, pueden clickear aquí Gracias por leerme, nos leemos la semana próxima con algún otro tutorialcito bien cheverongo. Namasté.
These are so cool! you're really good!
Very thank you!