La copiadera no solo sucede en inglés. Sucede en todas las materias, incluyendo las que yo imparto, Literatura e Historia. Y no es exclusivo de una sola región; también sucede mucho en mi país, México.
Creo que esa situación proviene de la falta de interés por la materia; el alumno nunca se acerca al maestro a aclarar dudas no tanto por el miedo al maestro como por el desinterés en aprender. Incluso cuando les dices que el proyecto vale el 40% de la calificación y el examen el otro 40%, ambos criterios principales de evaluación, la amplia mayoría le importa un reverendo bledo; solo quieren salir de ahí y no regresar.
Los jóvenes de hoy día, la amplia mayoría, no tienen motivación y tienen miedo al trabajo y al esfuerzo. Les pesa demasiado pensar y resolver hasta operaciones matemáticas sencillas. Incluso protestan por realizar cosas mucho más sencillas como resumir dos páginas de una lección.
De eso los padres son culpables; al facilitarles todo, al no exigirles que den resultados y al no inculcarles el gusto y la curiosidad por aprender, los padres fallan de manera colosal al punto de endilgarle al docente funciones que no le corresponden.
¡Saludos!
Muchas gracias por tu aporte. Lo sé, la cuestión generacional le ha dado totalmente la vuelta a los asuntos de trabajo, esfuerzo, estudios. Los padres de ahora sólo quieren que se porten bien, en vez de preocuparse más en inculcarles esos valores.
Creo además que también es culpa del Estado. Refiriéndome a Sur América, creo que deberían cambiar el modelo estructuralista con urgencia. Hacen mucha falta tener programas para ejercer más el constructivismo, más el racionalismo. Y así por lo menos contrarrestar las enseñanzas tan estrechas del hogar, y hacer ciudadanos con iniciativa y no sólo que se vayan con la corriente.
México de hecho está pasando por esa serie de modificaciones. El problema es que su aplicación, lejos de ayudar, ha perjudicado tanto a alumnos como a maestros. El modelo que manejan actualmente, el de competencias e interdisciplinariedad, está tan mal diseñado y mal aplicado que uno como docente ya no sabe qué hacer ante tanto caos. Por eso yo realizo modificaciones a mi programa; procuro que mis alumnos traten de aprender (aunque sin mucho éxito) que la historia como les pinta el libro no es del todo creíble. Hay datos e investigaciones que contradicen al discurso oficial, y esos datos se los enseño.
Lamentablemente, como mencionó un amigo hace tiempo, el mexicano promedio creer que saber historia es solo un relleno cultural y que no es importante. Muy pocos saben que saber la historia de tu nación te puede salvar de cometer atrocidades futuras.
¡Saludos, @dddaniela!
Valoro mucho tu profesión.